“Quería ser mas fuerte, quería ser mas valiente... Quería Odiarte tanto... Y solo quería amarte menos”.

Mi cuerpo frió, la soledad de mi cama. Ya casi no te recuerdo. He imagino que si algún día llamas te diré: Estoy bien, soy feliz... Aunque no sé si sea cierto. Pero podría serlo, en determinado caso... en el sentido estricto, ¿Qué es la felicidad?

El otro día, lloré muy temprano. Fue muy triste porque ni siquiera lloré por vos, lloré por nuestro amor, que yacía muerto en quién sabe qué lugar, ya no nos amábamos y era devastador.

“En el cementerio de tus ojos se guarda mi vida, concluida entre tierra y espinas... que se llevan el aliento con cada lagrima...”

Y de nuevo me siento vacía... a veces confundida... cosas nuevas, como todo... la vida sigue, sin vos... sin tantos...

Yo sé que tú eres de otra y a pesar de eso espero.
Y espero sonriente porque yo sé que un díacomo en amor,
el último vale más que el primero
tu tendrás que ser mío. Yo sé que tú eres de otra pero eso no me importa.
Porque nada es de nadie si hay alguien que lo ansía.
Y mi amor es tan largo y la vida es tan corta
que tendrás que ser mío. Yo sé que tú eres de otra,
pero la sed se sacia solamente en el fondo de la copa vacía.
Y como la paciencia puede más que la audaciatú
tendrás que ser mío. Por eso en lo profundo de mis sueños despiertos
yo seguiré esperando porque se que algún día
buscarás el refugio de mis brazos abiertos
y tendrás que ser mío.

José Angel Buesa